“Las penas con pan son buenas”… cuántas veces hemos escuchado y repetido está frase tan pegajosa, tan mexicana y tan acertada, pues, a veces, basta con el olor del pan recién horneado para sentir un apapacho en el alma: esponjocito, cremosito, dulcesito; todas las texturas están ahí para flechar al corazón y regocijar al estómago.
No importa si lo que quieres es curar una pena, darle un regalo a tu Valentín, celebrar el día de las madres, festejar tu cumpleaños o simplemente consentirte; Wuarawua Panadería Vegana siempre tendrá una opción para ti.
Repostería y panaderia vegana es lo que nos ofrece esta empresa orgullosamente tlaquepaquense conformada por dos hermanas con el firme propósito de demostrar que lo basado en plantas también es rico, accesible y de calidad.
Haciendo honor a la frase inicial, Gisela y Alejandra emprendieron y prosperaron su proyecto en medio de situaciones nada amigables, tal como nos lo platicaron en la entrevista que atentamente nos otorgaron.
¡Bienvenidas Ale y Gis! Para iniciar, cuéntenos un poco sobre la fundación y crecimiento de su negocio.
¡Gracias! Es un placer hacer está entrevista. Wuarawua nació hace casi dos años, en medio de la pandemia, razón por la cual ambas nos encontrábamos sin trabajo. Comenzamos creando recetas para consumo propio, después se nos ocurrió publicarlo entre los vecinos ¡Y vaya sorpresa nos llevamos! Tuvimos un excelente recibimiento, nos apoyaron sin conocernos y confiaron en nuestros productos. Desde entonces hemos seguido creciendo, dándonos a conocer de poquito a poco en grupos, comunidades y redes sociales.
¡Sensacional! ¿Y qué pueden decirnos sobre ustedes, las fundadoras de Wuarawua? ¿Son veganas? ¿Cuál es su misión?
Llevábamos un tiempo haciendo nuestra transición de vegetarianismo-veganismo.
La situación COVID fue decisiva para nosotras; escogimos enfocarnos en hacer algo desde nuestro hogar, sacar provecho de nuestros conocimientos; Gisela en la creación de recetas y productos, y Alejandra enfocándose en el marketing y manejo de redes sociales Terminó siendo un impulso para terminar nuestro proceso; no solo queríamos una fuente de ingresos, sino también transmitir un mensaje de conciencia sobre la vida vegana y sostenible. Es por eso que nuestra dinámica es sobre pedido; evitamos desperdicios y garantizamos calidad. Queremos demostrar que el veganismo puede ser accesible y delicioso. Actualmente llevamos poco más de un año con nuestros nuevos hábitos veganos y sostenibles.
¿Qué ha sido lo más retador en su proyecto de fundar una panadería vegana?
Como negocio pequeño y que ofrece productos alternativos a los originales, hemos tenido varios retos: En la producción, adaptando recetas, sustituir ingredientes y lograr texturas y sabores. Todo ha sido a prueba y error hasta que perfeccionamos nuestros resultados.
Y por otro lado, en la cuestión publicitaria, darnos a conocer, lograr tener presencia. Con mucha, mucha perseverancia hemos conseguido hacernos de clientes que a su vez nos empiezan a recomendar y eso nos ha ayudado a crecer y lo agradecemos mucho. Ahora nuestro siguiente reto es conseguir un espacio físico, tener un local; queremos llegar a más personas.
¡Mucha suerte! Ya que lo mencionan, ¿Cuál es la visión que tienen durante los próximos años?
Definitivamente continuar y hacer aún más grande este proyecto; contar con un espacio físico donde tengamos nuestros productos y expandir el menú con opciones saladas y bebidas para que nuestros clientes puedan disfrutar en el lugar. Estamos trabajando en eso y esperamos lograrlo pronto.
¡Ya verán que si! Y sobré su menú, ¿Cómo ha sido el proceso? ¿Qué tan seguido lo renuevan?
En un principio teníamos un menú bastante orgánico y sencillo. Cómo nos gusta mucho innovar y divertirnos en el proceso, hoy en día se podría decir que tenemos dos menús; El “base” que es el original, con productos siempre disponibles, y el “temático”, que lo lanzamos según las temporadas o celebridades del año y cambia cada dos meses aproximadamente.
¿Cuál es el producto más popular que tienen?
Sin dudarlo son nuestras tortu-conchas, que son un giro a la concha tradicional. Son súper llamativas y les damos un look diferente en cada temporada, eso las hace especiales e ideales para cualquier ocasión.
¡Son súper tiernas! Muy diferentes también. Abordando eso, ¿Qué dirían que las diferencia de cualquier otra panadería vegana?
Creemos que son dos cosas en especial, las que nos caracterizan. Una es que somos creadoras y experimentadoras: amamos jugar con colores, texturas y formas, queremos que nuestro producto no solo sea delicioso, si no también estético y llamativo.
Por otro lado, le damos mucha importancia a la accesibilidad; queremos mantener buenos precios para que incluso aquellos que no siguen una alimentación en específico nos prefieran. Es nuestra intención llegar a todo tipo de comensal y pelear con el mito de que ser vegano es un lujo caro.
¡Excelente! Ya por último, orientenos un poquito sobre como conseguir sus productos.
Aún no tenemos un espacio físico, pero nos pueden contactar en redes sociales y realizar sus pedidos. Manejamos varios puntos de entrega por la ZMG y nosotras laboramos en Tlaquepaque. Nuestros horarios y menús los pueden conocer en nuestro Instagram y Facebook, o mandando un WhatsApp al número 3338220702 (haz clic aquí para envíarles un WhatsApp).
¡Agradecemos fuertemente a Gisela y Alejandra por el tiempo y atención brindada! Felicidades por su excelente proyecto.
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